On Nov. 19, 2025, during the year-end meeting of the Lake Union executive committee in Berrien Springs, Michigan, members approved a special statement expressing concern for the evolving circumstances affecting immigrants in our cities.
The full text of the statement is below:
The Lake Union Conference affirms the North American Division’s statement “An Appeal for Human Dignity and Decency,” released on January 30, 2025. We support the values expressed in that message, recognizing its call for every person to be treated with the respect and compassion that come from being created in the image of God.
As followers of Jesus Christ, we believe that every human being is created in God’s image (Genesis 1:27) and is therefore worthy of dignity, care, and respect. Our concern for immigrants, refugees, their families, and all who are vulnerable arises from Scripture and from our commitment to reflect the character of Christ.
God calls His people to uphold justice, extend mercy, and walk humbly with Him (Micah 6:8). We remember that Jesus Himself experienced life as a refugee in His early years (Matthew 2:13 to 15). Scripture repeatedly reminds us that God’s heart is turned toward the stranger, the widow, and the orphan (Deuteronomy 10:18 to 19).
We also recognize that those who serve in roles that uphold civic order and national safety carry significant responsibilities. Many men and women in these positions face difficult decisions each day, often navigating emotionally complex situations. As a faith community, we hold them in prayer, asking that God grant them wisdom, discernment, fairness, and compassion.
Many immigrants within our communities have come from challenging circumstances, seeking stability, safety, or opportunity. Their perseverance, hope, and contributions enrich our neighborhoods, churches, and workplaces. While their journeys may differ, their humanity and aspirations reflect the image of God in which they were created.
We affirm the following principles:
In harmony with the North American Division’s appeal, we encourage our churches, communities, and civic leaders to uphold approaches that respect both human dignity and the responsibilities entrusted to society for the well-being of all. We believe it is possible to care for the vulnerable, support those who serve, and honor the value of every person.
To those who feel unseen or afraid, we say: You are valued. You are not alone.
To those who serve in enforcement or public safety, we say: We pray for you and your families, and for strength and compassion as you carry out your responsibilities.
To all who seek to follow Christ: May we be instruments of peace, channels of compassion, and witnesses of God’s justice and mercy in our communities.
“Truly I tell you, whatever you did for one of the least of these brothers and sisters of mine, you did for me.” - Matthew 25:40
November 19, 2025
Lake Union Executive Committee
La Unión del Lago afirma la declaración de la División Norteamericana titulada “Un llamado a la dignidad y decencia humanas”, publicada el 30 de enero de 2025. Respaldamos los valores expresados en ese mensaje, reconociendo su llamado a que toda persona sea tratada con el respeto y la compasión que provienen de haber sido creada a la imagen de Dios.
Como seguidores de Jesucristo, creemos que todo ser humano ha sido creado a la imagen de Dios (Génesis 1:27) y, por lo tanto, es digno de respeto, cuidado y consideración. Nuestra preocupación por inmigrantes, refugiados, sus familias y todos los vulnerables surge tanto de las Escrituras como de nuestro compromiso de reflejar el carácter de Cristo.
Dios llama a Su pueblo a practicar la justicia, amar la misericordia y caminar humildemente con Él (Miqueas 6:8). Recordamos que Jesús mismo experimentó la vida de un refugiado en Sus primeros años (Mateo 2:13–15). Una y otra vez, la Biblia nos recuerda que el corazón de Dios se inclina hacia el extranjero, la viuda y el huérfano (Deuteronomio 10:18–19).
También reconocemos que quienes sirven en funciones que resguardan el orden cívico y la seguridad nacional llevan grandes responsabilidades. Muchas mujeres y hombres en estas posiciones enfrentan decisiones difíciles cada día, navegando situaciones emocionalmente complejas. Como comunidad de fe, los sostenemos en oración, pidiendo que Dios les conceda sabiduría, discernimiento, justicia y compasión.
Muchos inmigrantes en nuestras comunidades han llegado tras enfrentar circunstancias desafiantes, buscando estabilidad, seguridad u oportunidades. Su perseverancia, esperanza y contribuciones enriquecen nuestros vecindarios, iglesias y lugares de trabajo. Aunque sus trayectorias sean distintas, su humanidad y aspiraciones reflejan la imagen de Dios en la cual fueron creados.
Afirmamos los siguientes principios:
Toda persona lleva la imagen divina (Génesis 1:27), sin importar su nacionalidad, estatus legal o situación económica.
Proteger a los vulnerables honra a Dios. “El que oprime al pobre afrenta a su Hacedor, pero el que es bondadoso con el necesitado honra a Dios.” (Proverbios 14:31)
Dar la bienvenida al extranjero cumple el mandato de Dios. “Al extranjero que reside entre ustedes, trátalo como a uno nacido en su tierra. Ámalo como a ti mismo.” (Levítico 19:34)
La autoridad debe promover lo que es correcto. Romanos 13 enseña que quienes son investidos con responsabilidad han de cumplir sus deberes de manera justa y con integridad moral.
En armonía con el llamado de la División Norteamericana, animamos a nuestras iglesias, comunidades y líderes cívicos a sostener enfoques que respeten tanto la dignidad humana como las responsabilidades sociales que promueven el bienestar de todos. Creemos que es posible cuidar a los vulnerables, apoyar a quienes sirven y honrar el valor de cada ser humano.
A quienes se sienten invisibles o temerosos, les decimos: Ustedes tienen valor. No están solos.
A quienes sirven en funciones de seguridad o cumplimiento de la ley, les decimos: Oramos por ustedes y sus familias, y por fortaleza y compasión al cumplir sus responsabilidades.
A todos los que buscan seguir a Cristo: Que seamos instrumentos de paz, canales de compasión y testigos de la justicia y misericordia de Dios en nuestras comunidades.
“De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.” - Mateo 25:40
19 de noviembre de 2025
Comité Ejecutivo de la Unión del Lago